Hottie folla cachonda – y, por supuesto, veremos cómo fue todo en otro de nuestros cuentos eróticos con fotos de sexo aquí en el sitio.
Estaba viajando, en esto una deliciosa tomó autostop y me dio el coño, y no fue sólo el coño, dio su culo apretado también.
Viajando por el campo de SP, encontré en la entrada de una ciudad a una mujer de 27 años, cabello largo y cuerpo delgado haciendo autostop, me detuve y le pregunté a dónde iría, ella me respondió que iría a la siguiente ciudad y amablemente la llevé.
Conversando con ella, supe que era novia y le dije que iría a una ciudad cerca de 60 km delante de la de ella, ya en Minas, ella preguntó si le gustaba esta vida de viajero, y dije que le encantaba, pero la soledad la noche era lo único malo.
Cuando llegamos a la ciudad la llevé a la calle donde vivía dejándola allí. Ella me pidió que esperara, qué sorpresa la mía, en dos minutos regresó diciendo que iría conmigo hasta donde yo fuera para pasar la noche juntos. Me quedé sin reacción aún más cuando ella se subió al auto y seguimos viaje.
Ella hablaba que nunca tuvo este tipo de acción, pero que tenía simpatía por lo que hablé, dijo que adoraba a su prometido, pero tenía sintiendo algo diferente por mí.
Al llegar al hotel ella comenzó a llorar diciendo que no sabía lo que estaba haciendo, era difícil volver y llevarla de vuelta, pero me dispuse a llevarla hasta la estación de autobuses y pagar su pasaje de vuelta, ella pensó un poco y decidió quedarse, tomamos una cerveza, y por suerte estaba prevenido con condones.
Después de esto ella acabó devorándome, arrancó mi ropa y comenzó a chuparme todo, tragándolo todo con tamaña voluntad y voracidad, ella se desnudó, puso un condón, se sentó en mi regazo y comenzó a cabalgar y revolver intensamente, me quedé hasta sin acción, después de gozar, se levantó y acabó sentándose nuevamente metiendo Mi pica en su culo, cabalgó intensamente hasta gozar dos veces.
En este punto no me había corrido, así que comencé a acariciar su coño, se llamaba Camila, O era el nombre que ella
dijo, nos quedamos acariciando y me di cuenta de que ella realmente le gustaba el sexo anal, porque siempre me ofrecía su culo, me metía en el coño, pero siempre se deslizaba para que mi polla entrara en su culo… me entregué a ella y solo me deleité con el sexo anal, quedándome toda la noche follando.
Por la mañana sale a llevarla a casa y durante el viaje ella quiso que yo parara para ella hacer un oral delicioso y comer su culo por última vez. Qué mujer deliciosa y loca, cogió autostop y dio el coño, nunca más la vi, pero quedó el momento y la voracidad del culo de ella en mi recuerdo. La caliente folla con tesón y es incluso una delicia vio.