Relatos sexuales – Hace tiempo que mi esposa y yo manifestamos interés en el mundo liberal. Yo ya tenía experiencia con otras mujeres, ella nunca con otro hombre. Conocimos a una pareja por una aplicación y después de un tiempo decidimos reunirnos.
Al principio marcaron en un motel para una sola conversación, pero al tratarse de un motel ya sabía que podía rodar todo.
Esposa chupando otro macho
La conversación va y la conversación viene al dejar a mi esposa sola lo veo acercarse a ella y besarla. Qué cachondo que dio, en eso yo también ya comencé a besar a su mujer. Ella era bajita, caliente y fogoso. Mi esposa esta noche no quiso hacer nada, pues estaba en aquellos días, pero pateó aquel palo con mucha maestría. Hora chupaba su polla, hora la mía, hora besaba a la otra mujer.
Comencé a caer de boca en ese coño que estaba a mi disposición, pero la atención se centró en saber cómo le iría a mi esposa. Juro que chupó esa polla durante unos 20-30 minutos sin cansarse. Mientras tanto, ya estaba golpeando el apretado coño de la mujer de ese tipo. Ella gritaba que lo estaba disfrutando y me maravillé con el ingenio de mi esposa. Vi que ella estaba realizada y mientras yo metía en aquel coño mi esposa alternaba entre una mamada y un beso en la boca de la mujer que yo metía.
Cuando terminó, nos despedimos y volvimos a casa e incluso ella chupando una rodilla toda la noche, en la vuelta a casa ella chupaba mi rodilla mientras yo conducía.
Pronto marcaremos de nuevo con esta pareja y pasaré los relatos para ustedes, pues en este día mi esposa desea hacer la tan soñada DP. Me quedo de Palo duro sólo de pensar y no veo la hora. Esa sensación es la mejor del mundo, nuestra sexta incluso mejoró después de eso. Hasta la próxima