Compartiendo mi novia

Compartiendo mi novia -Han pasado unos meses desde que mi loca follada con tres compañeros de clase y un estudiante fue transferido de otro polo era era bombero, tenía 30 años, moreno, fuerte y una sonrisa súper emocionante. Llevaba gafas y le parecía un encanto.

No hace falta decir que seguía pensando varias cosas tan pronto como lo vi.pero tenía algo malo, tenía novia y era igual de hermosa, ella no estudiaba con nosotros, pero a veces aparecía en la Universidad. Un amor de persona, pronto nos hicimos amigas y más adelante quedaba saber más sobre aquel buen chico preparaba.

A pesar de la carita de santo, ella decía que él no daba descanso. Siempre pensaba en terminar el noviazgo. Con más intimidad dije que pensaba que su novio era hermoso y no ocultaba mi interés, solo que no hablaba al respecto toda la hora, bastó una vez, como un aviso. Pero eso no afectó nuestra amistad, incluida ella aprovechó para nunca romper cuando los tres estábamos juntos en algún momento.

Una vez, al salir de la universidad en dirección a mi casa, lo vi disgustado por el neumático de su coche pinchado y Step marchito. Como era de noche, su primera preocupación fue decirle a su novia lo que había sucedido y mientras él llamaba me acerqué para saber lo que había sucedido y, en medio de la llamada, me dijo que su novia iba a traer su step.

Como su novia estaba trabajando en un hospital – era enfermera-y iba a tardar un poco en SALIR, le pregunté si no quería ir a casa. En principio lo dije sin ninguna intención, pero percibiendo que sería más peligroso quedarse esperando en un estacionamiento que estaba cada vez más vacío él topó y caminamos hasta donde vivía – quedaba hace unos 5 minutos de allí a pie.

En la ruta llamó a algunos amigos, pero el amigo más rápido llegaría de allí 1 hora. Regresó con su novia y ella dijo que tardaría más, por lo que comentó que iba a esperar a su amigo en mi casa para no quedar expuesto en el estacionamiento. Como estaba muy tranquilo en el momento de la llamada, noté que el tono de voz de su novia denunciaba su preocupación por eso. Creo que si pudiera, incluso dejaría lo que estaba haciendo para irse, pero solo dijo que estaba bien.

En casa le ofrecí unas galletas, algo para beber y él sólo quería agua. Fui a la cocina, tomé un vaso del estante debajo y cuando me di cuenta de su presencia en la puerta, comenté que incluso era pecado.

Me quedé sin entender y pregunté Por qué. Él completó diciendo que era pecado una mujer con un culo de esos vivir sola.

Me reí sin gracia y dije que estar sola no significaba que no tuviera a alguien con quien divertirme. Desconversó notando que comentó algo que no debía, tomó el agua y regresó a la habitación.

Entonces saqué un tema bien nada que ver sobre las clases, sobre lo que pensaba de la ciudad después de haber estado casi 10 años fuera (debido a su trabajo) hasta que me di cuenta que él buscaba una forma de tirar un tema diferente y hacía una cara bien cabrón para mí, fue cuando noté que mi escote estaba revelando más de lo esperado.

Me emocioné un poco con la idea de seguir bromeando e hice una cara más sucia cuando dejé de hablar y me preparé, él estaba un poco desconcertado, pero esta vez se sintió más seguro para pedir que me sentara a su lado en el sofá. Me levanté y bien cachonda llegué del lado de él y pegué mi cuerpo en el de él al punto de percibir su palo moverse.

Luego pasó su brazo alrededor de mi cuerpo y me dio la vuelta para darle un beso sin que pudiera reaccionar.

El beso fue un poco extraño al principio, pero tan pronto como se dio cuenta de que no iba a reaccionar y estaba correspondiendo, me fue soltando y pude ir agarrando su polla sobre los pantalones tratando de sacarlo.

Fue entonces cuando se inclinó hacia atrás todavía besándome y sosteniendo ambas manos en mi nuca y espalda mientras iba abriendo la cremallera para ver esa gran polla rebotar. Intentaba bajar, pero él continuaba con los besos cada vez más húmedos y safados mientras golpeaba una paja de leva en aquel tarado. Luego se inclinó casi tumbado en el sofá para finalmente darse cuenta de que me estaba tirando hacia su regazo. Todavía quería mamar, pero no me dejaba hablar entre besos.

Fue entonces cuando me agarró por el culo y frotó su rodilla dura contra mi xaninha por encima de los jeans que llevaba. Posicionó de una forma que quedó bien gustoso y pasé a pedir para mamar aquel palo.

Pero cuanto más se frotaba, más disminuía mi interés por mamar hasta que yo también quise meterlo dentro de una vez.

Mi coño empezando a ponerse delicioso
Mis pantalones estaban melosos con nuestros fluidos y me levanté para quitarme los pantalones y mostrar mi xaninha. Cuando iba al regazo de nuevo, él bajó su cabeza hacia mi coño y me agarró de una manera que pudo levantarme y llevarme hasta una pequeña mesa detrás del sofá y ponerme de espaldas con su boca ya chupándome. Grité con el susto, pero pronto gemí con las caprichosas Lamidas de ese bombero. Pedía rola y él simplemente me ignoraba chupando hasta hacerme gozar sabroso. Ya un poco blando con aquella reacción él se posicionó para poner la rueda hacia dentro y así lo hizo de una vez. Estaba tan mojado que la mierda ya comenzó caliente.

Comenzó a bombear aceleradamente el pollo asado mientras yo lo miraba con los ojos bajos en éxtasis por la corrida que me había hecho con la mamada. Se puso más fuerte, bombeó un poco más, levantó mis piernas a la altura de los hombros y sentí que alcanzaba lugares cada vez más profundos. Ya no conseguía tener fuerzas ni para gemir cuando fui sorprendida con un orgasmo muy intenso, fuerte y levemente demorado que apretó su rodilla con mucha fuerza mientras él seguía metiéndome dejándome descontrolada y sin saber si quería más o parase un poco. Después de eso me comió y me preguntó si quería chuparlo todavía, le dije que sólo si era para beber lechito. Más que rápido él sacó conmigo sintiendo su polla hincharse y sólo abrí la boca para tomar lo que estaba por venir. Ni siquiera se tocó y meló toda mi cara y parte de la mesa. Limpié su piroca con la boca hecho una putita y provocé un poco más hasta que su amigo llamó preguntando dónde estaba.

Preocupado por no dejar ninguna sospecha en el aire, agradeció la follada, tomó su ropa, se vistió viéndome chuparse los dedos llenos de semen y dijo que luego volvería por más. Solo dije que estaría esperando.

Cerró la puerta y salió al baño riéndose de la situación.

Luego empaqué mis cosas, limpié la mesa y recibí un mensaje de él diciendo que había sido una gran experiencia y que quería repetir nuestras citas, ya que ella no podía soportar su fuego.

Aún esa noche, su novia se burló de él y lo folló como si estuviera buscando rastros de una posible traición pero, en su opinión, nada había encontrado y todo rodó normalmente.

Desde entonces, nuestra relación siguió normal entre yo, ella y él…. a pesar de ser la amante del novio de mi amiga ella no desconfiaba de las veces que él pasaba en mi casa para follarme caliente.

Por el contrario, llegó a decir que sospechaba de otra mujer como amante de él hasta que, entre desconfianzas y quejas por él querer Sexo toda la hora ella decidió terminar. Sin una, me sobrecargó (si es que me entienden) de una manera que casi no tenía tiempo para estudiar y mientras hablaba de salir con nosotros, le corté las alitas y le dije que también estaba cansado de tanto sexo y salté.

Todavía se acostó con otras compañeras de la universidad y, aunque estaba caliente, la intensidad de las solicitudes y la frecuencia molestaban a todas las chicas hasta que se fue a fin de año a otro polo.