Meu marido pediu para

Meu marido pediu para – Udo comenzó cuando mi amigo me llevó a poner crédito en una farmacia.

Fuimos en coche a la farmacia hicimos lo que teníamos que hacer y nos fuimos. Todo el camino me cantaba diciendo lo caliente que estaba y que siempre tenía ganas de estar conmigo, etc.

Cuando paró el coche y pidió un beso y yo hice el mayor «culo dulce», pues no quería parecer ofrecida más allá de ese negro delicioso me tascó un beso y el clima fue calentando, pero como estábamos en la calle no tenía como rodar nada, fue cuando él resolvió llevarme en medio de la carretera y follarme la misma.

El día que le di al amigo negro del palo grande
En ese momento pensé que era una locura más cuando él comienzo a chupar mis pechos y quitarme la ropa me sentía una vana una puta tava adorando, fue cuando él comenzó a chupar mi coño dejándola mojadita, llena de tesón.

Chupó muuito y luego sacó aquella polla para fuera, quedé aterrorizada porque nunca se la había dado a un negro que ni él.

Cuando sentí el tamaño de aquella pica confieso me quedé con mucho tesón pero también temerosa, pero cuando él encajó la pica en la entrada de mi xota, yo empecé a gemir igual una puta, pedía para meter todo y cuanto más él metía, más yo gemía. Follamos mucho en el borde de la carretera hasta que pedí parar porque su polla era muy gruesa y me estaba lastimando.

Confieso que pretendo darle mucho porque su polla es la que no defrauda a nadie.

Sempre transávamos quartas, sextas, sábados e domingos. O que eu queria era fazer sexo anal.

Ela uma negra, seios fartos, rabo enorme fazia um boquete perfeito.

Estaba con un vestido corto pegado al cuerpo con una hendidura en los pechos donde estaba bien muestra mis pechos blancos, me subí al auto me senté en el asiento delantero porque pasaríamos a recoger a mis amigas en el camino y pronto me di cuenta de que llamé su atención de la misma manera que él llamó la mía.


Sentí un clima de tesón en el aire nos quedamos conversando, me di cuenta de que todas las veces que él iba a pasar marcha apoyaba en mi pierna y eso me dejaba excitada, él repitió eso por unas tres veces, yo empecé a corresponder la embestida de él aproximé más la pierna de la marcha, Tomé coraje y comencé a alisar la pierna de él, llega hasta cerca del palo de él y bajé la mano.

Él no perdió el tiempo se desvió del camino y nos detuvimos en una calle desierta los vidrios del coche estaban bien filmados me tiró y me besó ya sosteniendo mi pelo, tomó la mano en el ajuste del banco y empujó todo el banco hacia atrás él abrió bien mis piernas yo estaba con una bragas muy pequeña de encaje rosa, él llegó ella para el lado comenzó a masajear mi coño toda mojadita él se volvió loco con mis pelitos pelirrojos lo que sólo aumentó su tesón, me besaba mientras masajeaba mi grelinho rosado metió la mano en la hendidura del vestido, puso mis tetas, los picos eran duros con nunca se habían quedado, no pasó mucho tiempo me corrí en su mano.